EL MACHISMO MATA ¡BASTA YA!

Otro fin de semana negro para las mujeres y para la gente de bien: dos mujeres asesinadas y una herida de gravedad por culpa del terrorismo machista.

Ahora asistimos al "postureo", los minutos de silencio y demás "lavaconciencias" de las instituciones y de la sociedad. Aún así, ni tan siquiera el "postureo" tendrá la relevancia mediática y política que otras miles de causas. Y volverá a normalizarse la situación, como si por habitual que sea, pueda tomarse como normal.

Y aparecen las voces de las feministas, indignadas, hartas y reivindicativas pidiendo un BASTA YA real, pidiendo de una vez por todas que se actúe para parar esta lacra que tantas muertes tiene a sus espaldas. Sin embargo, en lugar de sumar adeptxs a la causa, saltan rápidamente todas las alarmas. Son unas resentidas, buscan la revancha y fundar un mundo "hembrista" con privilegios para ellas... Aparecen rápidamente toda una serie de argumentos falaces que, sin embargo, el "sentido común" acepta súbitamente como los argumentos de la igualdad y la democracia. 

Pues no, no es así. Si fuera cierto que viviéramos en la igualdad real, quizá algunas argumentaciones podrían tomarse en consideración. Pero señoras y señores, no vivimos en ese mundo idílico que quieren hacernos creer que existe. Por favor, envíenme la dirección de ese mundo que quiero mudarme a él, porque en el que yo vivo sufro constantes discriminaciones por el simple hecho de ser mujer. Y por supuesto que hay muchísimas mujeres en el mundo que sufren discriminaciones más severas y preocupantes que las mías, pero que las mujeres tenemos que luchar el doble todos los días para conseguir lo que los hombres tienen sin esfuerzo, es tan verdad como que el agua se convierte en hielo al alcanzar los cero grados. Y si empezamos a no admitir como verdadero esa premisa, ya estamos fallando. Porque no querer ver el problema sólo ayuda a perpetuarlo. Y de esos micromachismos intolerables diarios vienen, así de claro, las muertes. No hay más camino que la reeducación de todxs, no hay más camino que ponerse las gafas violetas. Una vez que sea cierto que todxs llevamos esas gafas, entonces nos sentamos a hablar de lo que quieran, pero primero digan alto y claro que EL PROBLEMA EXISTE Y SE LLAMA MACHISMO.

Así pues, basta ya de seguir dando cancha a todas esas falacias que hablan de:

-Las denuncias falsas (0,01% según los organismos oficiales, no muy feministas, la verdad).

-Las supuestas ventajosas medidas que tienen las mujeres en los divorcios porque suelen ganar la custodia de sus hijxs (si antes del divorcio las mujeres se ocupan en un 90% del cuidado de lxs hijxs, de ahí la doble jornada laboral de las mujeres -dentro y fuera de casa-, lo lógico es que también después del divorcio sigan mayoritariamente ocupándose ellas).

-La supuesta existencia del hembrismo, que lo único que perpetúa es lo incómodo que resulta asumir en la agenda política las reivindicaciones históricas del feminismo (para lo que nos inventamos conceptos para crear confusión)

-La existencia de las feminazis, otro invento del posmachismo que muestra a las oprimidas por el patriarcado como opresoras (el mundo al revés, de nuevo)

-La defensa de las leyes ortográficas como si ahora lo imprescindible fuera esa obediencia, en lugar de lograr la visibilización de las mujeres también en el lenguaje (que crea conciencia porque el ser humano piensa lingüísticamente). Es decir, desobediencia civil pero no desobediencia ortográfica (tiene guasa el asunto)

-La existencia del SAP siendo que se ha demostrado científicamente que es falso, aunque algunxs jueces y juezas se empeñen en observarlo en sus sentencias.

-La confusión de la violencia de género (ejercida específicamente contra las mujeres por el hecho de serlo, de acuerdo a la construcción genérica que las sociedades y culturas han creado a lo largo del tiempo) con la violencia dentro de la pareja. Y claro que toda violencia es detestable, pero ahora estamos hablando de ESTA violencia. Cuando hablemos del sexo de los ángeles, yo también defenderé que lo elijan ellxs y no que se les imponga, pero ahora hablamos de violencia contra las mujeres, esto es, violencia de género.

Y basta ya de tanta estupidez, de tanta cerrazón o de tanta maldad. Asumamos todxs esto como problema prioritario porque las estadísticas están ahí: todos los años hay alrededor de 65 casos de feminicidios en nuestro país "democrático, avanzado y desarrollado". Las estadísticas también advierten de la alarmante subida de actitudes machistas entre lxs adolescentes. Sigamos perdiendo tiempo ridiculizando a las feministas que seguro que es el camino.

Lo siento, pero hoy estoy hasta los ovarios de este mundo.